El avance de la tecnología en el sector de la banca electrónica permite enviar dinero de una cuenta bancaria a otra sin distingo del país en donde se encuentre. Si bien existen diferentes métodos, las transferencias internacionales siguen estando entre las favoritas, la pregunta es: ¿Cuánto demoran en hacerse efectivas?
Son tres los aspectos que delimitan el plazo para que una transferencia internacional se haga efectiva; en primer lugar, si la cuenta destino se encuentra en países que conforman la zona única de pagos en euros, en segundo, el medio empleado para la operación y finalmente la divisa en la que se mande el dinero.
Atendiendo a estas tres consideraciones, la duración de una transferencia bancaria internacional puede demorar entre 1 y 5 días hábiles plazo estipulado de la siguiente manera:
- Transferencias internacionales entre cuentas de la UE en euros (SEPA): son las que demoran menos tiempo, haciendo que el dinero esté efectivo en 1 día hábil.
- Transferencias internacionales entre cuentas de la UE con moneda diferentes al euro: en este caso, el periodo de espera para que se haga efectiva alcanza un máximo de 4 días hábiles.
- Transferencias internacionales fuera de la UE: para este tipo de transferencias el plazo oscila entre los 2 y 5 días hábiles.
Lejos de lo que podemos suponer, hacer una transferencia internacional es un proceso sencillo que apenas demanda:
- Seleccionar el método de transferencia
- Disponer de todos los datos de la cuenta destino y su titular
- Conocer el código BIC.
¿Cuánto cuestan las transferencias internacionales?
En términos de comisión, las transferencias SEPA internacionales son gestionadas bajo los mismos lineamientos de las transferencias nacionales, es decir, por regla, suelen ser gratuitas en la mayoría de las entidades financieras.
Caso contrario a los que sucede con las transferencias internacionales fuera de Europa y con otra divisa, donde este tipo de transacción acarrea el pago de comisiones bastante elevadas, normalmente vinculadas al cambio de moneda, aunque también figuran costes relacionados con la propia gestión de la operación.
La situación empeora en los casos donde se requiere la intervención de entidades intermediarias, pero para hacernos una idea más o menos clara, en transferencias internacionales la comisión cobrada por operaciones en otra moneda suele rondar los 20 euros a los que se adicionan 15 euros más en concepto de SWIFT.
En resumidas cuentas, fuera de la zona SEPA las transferencias bancarias internacionales pueden tener un coste de comisión de unos 35 euros.
Opciones más rápidas para enviar dinero al extranjero
Pese a que la primera opción que viene a la mente cuando queremos enviar dinero al extranjero es una transferencia internacional, lo cierto es que en la actualidad disponemos de métodos mucho más rápidos, entre ellos:
Blockchain
Con una tecnología momentáneamente poco desarrollada, Blockchain permite la realización de transferencias internacionales de forma rápida y sencilla incluso aquellas que involucran divisas distintas al euro tardando un máximo de 2 días.
Muestra de ello es el servicio One Pay que ofrece el Banco Santander, producto financiero que brinda la oportunidad de transferir libras o dólares a Estados Unidos y Reino Unido.
Compañías fintech
Comparado con el tiempo de espera de un banco, las transferencias a países extranjeros por medio de empresas fintech es relativamente menor; opciones como TransferWise, TransferGo o Remitly se distinguen por posibilitar operaciones que en algunos casos, se ejecutan el mismo día.
Alternativa ajena a procedimientos electrónicos
Aunque los métodos antes expuestos son tan fiables y seguros como las transferencias bancarias al momento de enviar dinero al extranjero, hay quienes prefieren opciones ajenas a procedimientos electrónicos, por ejemplo un cheque bancario.
En este sentido la solución espera en servicios financieros que ofrecen giro postal, es decir, permiten el envío de dinero vía correo; sin embargo, esta opcion presenta dos grandes desventajas, por un lado lo elevado de su precio y por el otro, el tiempo que demora en llegar, además de ser un poco insegura en algunos países.
Ahora que ya sabemos cuánto tarda una transferencia de un país a otro, las condiciones y comisiones que acarrea, así como las opciones adicionales, lo que queda es escoger el servicio que más se adecue a las propias necesidades y nivel de urgencia.