Las personas que por algún motivo u otro no han podido pagar alguna deuda previa y fueron incluidos en la lista del fichero de ASNEF por su insolvencia, a menudo son rechazadas cuando intentan solicitar otro préstamo. Sin embargo, es posible optar por un préstamo particular urgente con ASNEF y te contamos cómo.
Los préstamos particulares urgentes con ASNEF son la mejor herramienta financiera que tienen a su alcance las personas que forman parte de este fichero, cuando necesitan solicitar un crédito. Además, estos se caracterizan por ofrecer muchos beneficios a los solicitantes.
A continuación, te contaremos más a fondo sobre sus ventajas, los requisitos para solicitar uno y más información relevante que te puede interesar si necesitas uno de estos préstamos.
Algunos de los beneficios más importantes que ofrece este tipo de préstamo son.
Son muchas las ventajas de las que disponen los clientes que planean solicitar uno de estos créditos particulares o privados urgentes con ASNEF, siendo uno de los más importantes que no importa si formas parte de la lista de insolvencia o morosidad de los bancos.
Además, las entidades que ofrecen estos préstamos realizan un estudio rápido cuando les concedes toda la documentación necesaria, por lo que no toma más de 48 horas.
Con respecto a los gastos relacionados al registro, gestoría y notaría son todos asumidos por parte de la entidad que actúa como prestamista. Sin embargo, los gastos de comisión de apertura, honorarios y tasación deberán ser cubiertos por ti, aunque todos estos formarán parte del préstamo en sí y allí se verán reflejados.
También es necesario añadir que la persona que solicita el crédito será la encargada de elegir la notaría donde firmará el contrato
El plazo máximo del que dispones para reintegrar toda la deuda con comisiones y tasas es de 20 años, aunque esto va a depender del contrato y de varios factores presentes en la deuda.
Actualmente, las compañías prestamistas que ofrecen este tipo de crédito cuentan con dos tipos de devolución, los cuales son la americana y la francesa.
Este último corresponde al modelo en el que mensualmente tendrás cuotas que engloban el capital más los intereses y a medida que abones a estas cuotas, reducirás el capital que aún te queda por pagar. Por ello, cuando pagues la última cuota, va a significar que has reintegrado toda la deuda.
Luego tenemos la devolución americana, que es el modelo en que tienes cuotas de intereses por pagar de forma mensual, pero no irá disminuyendo el capital que te falta del préstamo. Sin embargo, las cuotas son bajas en comparación a la devolución francesa.
Debes presentar los siguientes requisitos en forma de documentos.